17.11 al 20.11 - DE MILFORD SOUND A CHRISTCHURCH – EL REGRESO Y LA VIDA NUEVAMENTE EN BUS

Resumo los días posteriores al fin del tramo en bicicleta. El 17-11 me levanto temprano, luego de desayunar me voy al puerto de Milford a tomar el crucero que me lleva a recorrer los fiordos. Lamentablemente el día está lluvioso, por lo que no se puede apreciar el paisaje en su totalidad. Sin embargo las nubes y la lluvia le dan un aire místico al paisaje, a su vez la lluvia forma cientas y cientas de cascadas que caen desde las montañas que rodean al fiordo directamente al mar, algunas caen incluso hacia el vacío mismo y el agua se pierde en el aire mezclándose con la lluvia. Luego de un par de horas en el crucero recorriendo el fiordo, incluyendo la salida al mar, vuelvo caminando al hostel, bajo la lluvia, aunque ya a esta altura no me importa. Allí me despido de Pierre, Tania, Festine y Max, y tomo mi bus de vuelta hacia Te Anau. No me lo esperaba, pero este tramo en bus ha sido probablemente uno de los más lindos que haya tenido la oportunidad de hacer. El bus tiene grandes ventanales, el techo también es transparente, así que da la posibilidad de contemplar todo el paisaje que es increíble, a ambos lados de la ruta se levantan las montañas que son gigantes y espectaculares por su tamaño, repletas de bosques, y de las cuales continúan cayendo cientas y cientas de cascadas producto de la alta lluvia. Con música clásica en mis auriculares entonces me relajo plácidamente y disfruto del placer de viajar nuevamente en bus luego de tantos kilómetros en bicicleta. Llego a Te Anau y me encuentro con Lisa, la norteamericana de la cual me hice amigo en Wanaka, también me encuentro en el mismo hostel con Avish, el israelí que conocí en Franz Josef Glacier, así que nos quedamos todos charlando hasta tarde en el living con vista al lago, y luego con Avish tocamos un rato la guitarra como para despuntar un poco el vicio.







Al día siguiente tomo un bus hasta Queenstown, al igual que el día de ayer, disfruto placenteramente del paisaje desde la ventanilla del bus, viendo todos los lugares por donde pasé en la bicicleta, recordando lugar por lugar, y cuánto me costó hacer cada uno de los kilómetros que hice. Llego a Queenstown, me reencuentro con mis amigos Fran y Tina de Argentina que conocí en la isla norte y que están viviendo ahí hace unos meses, y nos vamos a tomar unas cervezas frente al lago. Luego se nos suma Johnny, mi amigo irlandés que ya había visto hace unos días, así que nos quedamos todos charlando y disfrutando del día de sol junto al lago. Me despido de todos, a las 15 me tomo mi bus hacia Christchurch, el cual pasa por Mount Cook / Aoraki, un lugar increíble en el centro de la isla sur, por suerte el bus se detiene y así puedo registrar en fotos el lago bellísimo con una cadena montañosa nevada de fondo, entre las cuales sobresale el Mount Cook. Llego a la noche a Christchurch, la ciudad es muy grande y ruidosa, el único hostel en donde consigo lugar también es ruidoso, cosa que al principio no me cae muy bien, luego de tantos días de haber estado en la tranquilidad de la naturaleza. Cansado luego del largo día de viaje me voy a descansar, y decido además quedarme un día más en Christchurch para conocer un poco la ciudad. Al día siguiente me voy a recorrer la ciudad, hay un día soleado -que me hubiera venido bárbaro en Milford Sound- así que en fin, recorro la ciudad que es muy pintoresca, muchas construcciones antiguas de estilo inglés, entre las cuales sobresale el emblema de la ciudad que es la catedral. Tomo luego el “tram” que es una especie de tranvía de principios de siglo, el cual recorre los lugares principales de la ciudad, todo muy ordenado y pintoresco. A la tarde me encuentro con mi amigo Juan de Uruguay, a quien ya me había encontrado de casualidad en Wesport -parece mentira que sea tan pequeño el país, me encuentro a todo el mundo- así que nos quedamos charlando en la plaza. Me encuentro también en la plaza con Chino, otro amigo de Argentina, así que nos tomamos una coca y nos quedamos charlando en la plaza hasta que se hace de noche. Luego me vuelvo al hostel y me voy a dormir, preparándome para un nuevo día de pedaleo mañana, que no estaba en mis planes pero que decido hacer como para terminar el viaje de la misma manera que lo empecé: pedaleando.

2 comentarios:

  1. Que hermosas fotos cabeza!!! me encanta tu blog!!!
    Flor

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  2. felicitaciones loco!
    soy tmb un argenitno en nz con la work visa y en marzo me voy a recorrer la isla sur en bici con un amigo. solo que con mas tiempo, menos preparacion y espero visitar mas lugares
    tu blog me vino al pelo para ir sabiendo con que nos vamos a encontrar

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